Poco antes de las 2 de la tarde de este miércoles se soltó el diablo en Vallarta. Por todos los rumbos de la ciudad se podían escuchar sirenas de patrullas y ambulancia que se dirigían a gran velocidad hacia la zona cero de la tragedia, las instalaciones de la Fiscalía General de la República ubicadas en el corazón de la colonia Hermosa Provincia.
Al mismo tiempo las Fiscalías de Jalisco y Nayarit literalmente sellaban las entradas de Puerto Vallarta provocando un caos vehicular con un enorme embotellamiento en el norte de la ciudad, donde la fila de autos con rumbo al estado de Nayarit era visible desde el aeropuerto de la ciudad.
La tragedia empezó a escribirse al filo del mediodía, cuando a las oficinas regionales de la Fiscalía General de la República arribó Francisco N en calidad de detenido, procedente del municipio de Tomatlán donde fue arrestado por policías federales por posesión de un arma de uso exclusivo del ejército.
Parecía un asunto de rutina más en la Fiscalía, donde el detenido posó tranquilamente para la foto de la ficha: 1:73 de estatura, pelo castaño con corte moderno y desaliñado, camisa deportiva de colores negro y gris con el número 12 y, entre sus manos, el papel con sus datos elementales, nombre completo, fecha de arresto, 26 de octubre de 2021, y delito que se le imputa, Portación de arma de fuego sin licencia.
Luego del clásico fichaje Francisco N fue trasladado a los separos que se encuentran en la parte baja de las instalaciones de la Fiscalía, conducido al parecer por solamente un Policía Federal Ministerial, al cual de alguna forma logró desarmar y herir de gravedad con su propia arma.
Al escuchar las detonaciones un segundo Policía Ministerial acudió a los separos, siendo también sorprendido por el agresor, quien tras balearlo igualmente de gravedad lo despojó de su arma y enfiló de inmediato hacia la salida, no sin antes apoderarse también de por lo menos 10 cargadores abastecidos.
Al salir de la Fiscalía el peligroso agresor corrió hacia la calle Río Nilo, donde se topó con una mujer que conducía un vehículo compacto de color azul de la marca Mirage, a la cual despojó del auto luego de herirla de un disparo en un pie.
Minutos después del vehículo fue encontrado abandonado en el cruce de las calles Río Lerma y Río de la Plata por lo que se organizó un operativo policiaco en toda la colonia López Mateos para tratar de dar con el paradero del agresor.
Mientras tanto los dos policías ministeriales heridos fueron trasladado de urgencia a la clínica 42 del IMSS, donde poco más tarde se hizo oficial la noticia de su fallecimiento.
Pese al enorme operativo de búsqueda por toda la región hasta estos momentos no hay pistas para dar con el paradero del agresor, a quien se le califica como un sicario de alta peligrosidad decidió a la facilidad con la que logró desarmar, herir de muerte y escapar de sus custodios a plena luz del día, en una de las zonas más populares de la ciudad.